Más papistas que el Papa

El título es muy obvio, sepan disculpar ustedes, pero es perfecto para lo que pienso escribir. Con el Papa argentino se vieron muchas cosas, pero la que hoy me interesa es cuán desnudos de recursos están quedando los medios voceros del poder y algunos líderes políticos, opositores y oficialistas. Analizaron la histórica noticia del nombramiento de un sacerdote argentino como Papa, desde una visión casi pueril. Guiados por el Amo de barro actual de los intelesctuales e ideólogos partidarios más ruidosos que analíticos que inundan los medios, el ellos o nosotros, un ejército de boquiflojos pedantes partió de la premisa de una discusión más por el cómo que por el qué y construyó una guerra estilo TEG entre Bergoglio y Cristina y empezó a tirar los dados. En este estofado, todas las supuestas virtudes del Papa lo son en relación a que son conductas, supuestamente, contrarias a las que tiene la presidenta.. Viaja en bondi y no en el Tango 01, usa zapatos viejos, habla bien de los medios, llama al diálogo, no usa carteras caras...Y del otro lado: apoyó a la dictadura, es amigo de Macri, no hace el hospital de niños en el Vaticano, y demás cuestiones ajenas a una religión de base conservadora. Estos loros desbocados, ni puta idea tienen de los protocolos presidenciales y eclesiásticos; nada dicen de cuestiones de fondo, de lo cercanas que están en la prácitca las ideologías de los dos; de lo lejano que está el estilo Bergoglio de los grupos de poder y los líderes opositores que hoy lo usan como cabeza de partido. Nada dicen, porque no les conviene, porque quieren seguir con el circo y quedarse con más vueltos que el bando de enfrente. Y en el medio, otra vez,  está la gente. Y nuestra dignidad.
DON CHICHO

"Hay que matarlos a todos"

"Los derechos humanos me importan una mierda a mi, quiero que la ciudad esté tranquila"
"Aca es palo y a la bolsa. A los más chicos habrá que darles cultura y encerrarlos a que estudien y al que estuvo dos o tres veces en cana y sigue con esto hay que hacerlo mierda"
"Hablo como un ciudadano común(...) Esto hay que arreglarlo culturalmente, pero a los que reinciden hay que cagarlos a palos a trompadas, y después hablarles. A veces hay que enseñar primero con una cachetada"
"Necesitamos salir de este despelote (...) ¿Cuántos serán los que roban, 20, 30 tipos? Bueno, matemos a todos y listo, a la miércoles"

A ver, señores, ¿Quién dijo esto? ¿Del sel? No. ¿Pando? No. ¿Los de la SRA? No. ¿Rico? No
Lo dijo el señor Pedro González, intendente de Villa Gobernador Gálvez, ciudad de Santa Fe.
No voy a detenerme en analizar los dichos, claramente bestiales, propios de la época más oscura de nuestro país. lo que quiero resaltar es que el señor González es un intendente del Frente para la Victoria. En el programa de Sietecase, luego de ratificar sus dichos, y agregar que el delito en su ciudad se agravó pues se mudaron varios villeros de Rosario, se autodefinió soldado de Cristina. Què fàcil sería hablar de este hecho si el protagonista fuera un señor del Pro, ¿no? Es estos tiempos en que el pan y queso ideológico parece obligarnos a denunciar o aplaudir según el partido al que pertenezca el personaje, muchas veces nos tragamos sapos de 20 kilos. Por eso escribo estas líneas, para seguir por el camino de dignidad ideológica que debemos seguir si realmente queremos elegir el país en el que queremos vivir. Señores como González no pueden formar parte de un espacio político que impulsó los mayores avances en materia de derechos humanos y derechos individuales y colectivos en la historia nacional. Esto es así de simple. Sino, todo se "acomoda". Todo es lo mismo. Todos los espacios políticos deben definir sus nortes y tener ordenados sus sures. Si es que no quieren ser una bolsa de gatos, claro. Porque no sería justo decir que Del sel expresa el sentir del Pro y que González se equivocó porque es un buen muchacho peronista. Del sel y González son iguales. Incluso González es peor aún, pues es intendente, no es un "ciudadano común".
A lo que voy es que deberíamos dejar de tragar sapitos y purificar (palabra jodida pero precisa en este momento) el rumbo partidario, político e ideológico. de otro modo todo es lo mismo y pierde peso; y cuando eso pasa ya sabemos quiénes ganan.
DON CHICHO

Iglesias privadas, escuelas públicas

El hecho fue que un centenar de manifestantes del Movimiento por la Dignidad, entraron a la catedral de Buenos Aires a modo de protesta por la gran cantidad de dinero que reciben, por parte del gobierno de Macri, las escuelas confesionales. Estuvieron un par de horas, se hicieron oir, les sacaron fotos y se fueron con el objetivo cumplido. Por supuesto que los señores que rezaban sus rosarios en las primeras filas se sintieron invadidos y se quejaron.
La Nación le dedica una página a la noticia, y lo curioso es que nada dicen de los más de mil millones de pesos que el gobierno de la ciudad les da a las escuelas No públicas, ante el destrato que les da a muchas escuelas municipales, sobretodo del sur de la ciudad. Habla de que un grupo Copó la catedral, y describe a "las bestias". Además, y aquí me detengo, titulan una foto en la que se ve a una monja rezando, de espaldas a la gente: "Cuando la política interrumpe la oración". ¿Muy groso, no? Ya sé que para los lectores de la Nación, la política es fea, impropia de la gente bien. Basta escuchar el discurso de los chicos del Pro. Pero a veces se van a la mierda de tan fanáticos que son. Porque convengamos que la inquisición fue política; que los lazos con las más feroces dictaduras monárquicas eran políticos; que la alianza con las derechas fascistas de España, Alemania e Italia era política; que la colaboración manchada con sangre con las dictaduras de América latina fue política; que meter las patas en políticas de salud y educación públicas es querer hacer política. ¿O usted cree otra cosa, ya que cree tanto? Si un Estado libre y soberano subsidia la actividad libre de un credo, ese credo está dentro de la agenda del Estado, por lo que participa de las decisiones políticas. Si son necesarios fondos para tanta obra que aún falta en la Nación, se podría pensar en recuperar los predios entregados a los distintos credos a lo largo del país, y sobretodo en dejar de darles dinero para sus temitas personales. Si Jesús viviera ¿sabés el quilombo que haría, no?
DON CHICHO

Héroes vivos matan banderas.

En la edición del viernes de El Argentino, Jorge Giles, en un artículo con Chávez de fondo, enumera una serie de factores que a su entender, fueron necesarios para que fuera pensable y desarrollada la idea de Patria Grande y de políticas para todos en América del Sur. Y entre lo que enumera, habla de que fue necesario que San Martín y Bolivar murieran en el destierro para que tengamos una misma historia de patria grande; que fue necesario que murieran Néstor Kirchner y Hugo  Chávez para  que entendamos que la patria grande ha nacido de nuevo; y que fue necesario que desaparecieran 30.000 hombres y mujeres para poder construir un país para todos y sin violencia.
Leía esto y recordaba las palabras de Chávez los días anteriores a su muerte. Los pedidos que le hacía a su dios. Hugo Chávez no quería morir, quería quedar roto, con dolor, postrado, pero vivo; vivo para seguir haciendo: "queda mucho aún para hacer, señores", dijo.
Giles plantea que fue necesario que Chávez y Kirchner murieran, o que desaparecieran 30.000 personas para que la América del Sur existiera. Chávez discute esto. Para que las políticas puedan llevarse adelante debe haber vida. Chávez vivo lo hizo, no su cadáver. Decir que fueron necesarios los 30.000 muertos es, en cierto modo, ser cómplices de los asesinos, es querer mártires, víctimas, y no hombres de carne y hueso, realizando tareas políticas (acciones concretas). Estamos en momentos de hacer, no de llorar y victimizarnos. Momentos de estar en los barrios, en el Congreso o en la ONU; y no en un local, pintando banderas con las caras de nuestros muertos mientras nos quejamos de que el imperio malo nos domina. Los 30.000 asesinatos fueron crímenes de lesa humanidad, y si esas personas estuvieran entre nosotros el país estaría mucho mejor, seguramente. Y mejor sería, también, que Kirchner y Chávez siguieran vivos, trabajando. Es una cagada que no estén.
Hacerles honor es trabajar, en cada trinchera.
DON CHICHO.

Murió Chávez

Murió Chávez. El comandante, el héroe, el populista, el dictador, el bravucón, el carismático, el libertador, el golpista, el democrático, el solidario, el loco, el gran orador, el revolucionario, Hugo. No importa cómo se lo nombre. Tampoco si nos cae bien o mal. Con Chávez se va el líder de un proceso revolucionario muy pocas veces visto en América latina e inédito en Venezuela. La obra de Chávez tiene como mayor logro el haber ampliado el ángulo de lo posible en política latinoamericana. Ni siquiera importa si lo hizo bien, más o menos o mal. En dos aspectos podemos ver lo que digo. En el ideológico puro, en relación al universo de ideas que tiró a la cara Chávez en su país, en América y el mundo; y que obligó a todos a sentirse incómodos en sus asientos. Hablo de ideas políticas, de cambios de rumbos, de alternativas a la autopista ideológica, de poner el pecho y no bajar la cabeza, ni adentro ni afuera, de ser coherente con los deseos de las mayorías populares. Y en lo ideológico práctico, en relación a la obra, a la participación real de aquellos que eran invisibles, a los que supieron lo que era la medicina preventiva, la educación, la planificación de vida comunitaria, la alimentación que se esconde muchas veces atrás de lo que se come, a los que por fin escrituraron lo publico. Con el gobierno de Chávez se inició una revolución. Reitero, con modos buenos algunas veces y malos en otras; poco importará dentro de muchos años. Con el gobierno de Chávez no se abrió la puerta, se rompió un dique que ya nunca se podrá montar de nuevo sin un tremenda tragedia. De ahora en más los que nieguen o bastardeen las causas populares, sabrán que son traidores.

DON CHICHO

Las rejas del PRO

No es menor lo que dijo la vice jefa de gobierno de la CABA, la Vidal, luego de que se hiciera pública la muerte de un jóven en la 9 de Julio. Aparentemente la muerte se produjo luego de un enfrentamiento entre dos "limpiavidrios" por defender una esquina de trabajo. La Vidal, un poco por no saber qué decir y un poco por tirar la pelota para otro lado, desnudó su ideología más básica; la suya y la del espacio que representa. Dijo, la chica de Castelar, que situaciones como la del asesinado se dan porque hay mucha gente en la calle, y que se trata de gente que llega desde las provincias o desde el exterior con una mano atrás y otra adelante y que el gobierno de la CABA no llega a tantas personas con sus políticas. Paso en limpio: las situaciones problemáticas se dan por la gente que llega desesperada o buscando trapicheo a la rica tierra de la Capital Pro. Ellos son los culpables de los robos, de la indigencia, de la gente en situación de calle, de la falopa...Nosotros hacemos de todo, pero no alcanza porque son miles que no paran de meterse, dice La Vidal. Por estas cositas, lo del parque Centenario no era una pequeñez, una cuestión doméstica, de un barrio.Era una demostración cabal de la ideología Pro. Las políticas no son para todos, son solo para algunos privilegiados. Por eso el objeto reja es casi fálico para los chicos copados de la derecha capitalina, porque es un mojón, indica un límite, un de acá para allá sí, de acá para allá no. Es una política del gueto. Una política exclusiva, no inclusiva. Las rejas son para cuidarnos de esos que son distintos a mi, son de otro orden, no hay nada acá que les pertenezca. Las rejas son para decirnos que hasta ahí podemos llegar, que los del otro lado son distintos, que lo del otro lado no me pertenece. No se extrañen que alguien justifique una reja en la General Paz con la idea de que roban y se escapan para capital, porque las calles están lindas y asfaltadas...o alguna boludez semejante
DON CHICHO