viernes, 28 de junio de 2013

La AFIP nos persigue como la SS

¿Qué se discute cuando se discute de política? ¿De qué se habla? ¿Qué se dice, aún sin querer decirlo?
La otra noche, en el programa "A dos voces" (¿se acuerdan cuando Lanata lo llamaba A dos sobres?) se hacía la clásica recorrida por todas las voces opositoras, no ya al gobierno, sino a un modelo ideológico, que a veces hasta el gobierno nacional abandona. Primero habló Lilita, después De Narváez, y luego Michetti, y llevando el hilo conductor: el señor Marcelo Bonelli. El telón de fondo era LA PERSECUCIÓN A LA JUSTICIA.por parte de la feroz SS del gobierno: La AFIP. Bonelli, a todos, dijeran lo que dijeran, les preguntaba "¿Este gobierno persigue a los opositores mandándoles la AFIP? Y todos, claro, decían que sí, que es terrible, que nunca se vivió una cosa igual...Pero dentro de la bolsa de gatos y de temas que cada invitado fue presentando para hacer ver al gobierno nacional como una dictadura agobiante, quedó atrapado una cuestión de fondo que nadie discutió, y que pasa de largo como colectivo lleno y se instala fuertemente en el imaginario popular: Pagar impuestos es un castigo. Queda dicho aunque no fue dicho que el que paga impuestos es una víctima de la persecución. Ya no es el idiota o el boludo, como en los '90; ahora es una pobre víctima que debe ser rescatada de las garras del Estado. Es muy interesante, porque esta gente es la misma que pide a gritos que se debe invertir en trenes, en rutas, en hospitales, al mismo tiempo que considera que pagar impuestos no es algo digno, sino un castigo. ¿De dónde creen estos señores que debe salir el dinero para sostener un Estado?, me preguntará usted con razón. ¿Tan tontos son que no se dan cuenta que entran en contradicción? Es que no entran en ninguna contradicción. Esta dirigencia lo que anhela es que empresas privadas se encarguen de la obra pública nacional. No quieren un Estado presente. No quieren un Estado si no sirve exclusivamente para asegurar el control social, a fuerza de represión, claro.
Lilita fue muy clara. En una de sus visiones proféticas dijo (literalmente) "Todos somos perseguidos por la AFIP". Y acá no se equivoca Lila, todos debemos pagar nuestros impuestos, en nuestra cuota y posibilidades. De otra manera no hay posibilidad de Estado. Instalar que contribuir con el Estado de todos es negativo e inutil, es atentar directamente contra lo público, contra el Estado mismo. Esto es lo que se dice abiertamente en programas de difusión política, y debemos escucharlo bien porque son propuestas claras de cierta oposición que se esfuerza en no hacer propuestas, pero a veces se les escapan sin que se den cuenta.
DON CHICHO
Pd: Antes de que salten aclaro: Si algunos delincuentes roban dineros públicos deben ir presos, Anular la importancia del pago proporcional de impuestos porque algunos se chorean la guita es tonto o mal intencionado. He dicho (Don Cosme, se lo extraña)

lunes, 10 de junio de 2013

Todo el periodismo ES periodismo deportivo

Insisto hoy con mi idea que afirma que el periodismo masivo (el más consumido, si se quiere) tomó las formas y los estilos del periodismo deportivo. Antes de meterme a justificar por qué afirmo esto, aclaro que algunos nombres y muy pocos medios no aplican para las consideraciones que aquí haré.
Particularidades del Periodismo Deportivo (léase desde aquí y hasta el final, como periodismo de fútbol):
-Habla de empresas que persiguen intereses particulares aunque estén teñidas de Sentimiento y sentido de pertenencia. En ocasiones las critica y en ocasiones es su vocero. Trata a los clubes o asociaciones como si fueran públicos y respondieran a intereses colectivos; pero esto es un blef, pues no lo son; reciben el clamor popular, pero no lo son, sólo visten sus ropas.
- El nivel de crítica es inversamente proporcional al nivel de amistad y/o admiración con el protagonista. La objetividad, aquí, es claramente un parecer particular. Si al 9 de Témperley no se rió de mi chiste, instalo que es un paquete, que no corre y no entrena; y si me prendo en el pase de un 5 de dos piernas zurdas, digo y hago decir que es mejor que Marangoni y que pide pista en Europa.
-Habla con el resultado puesto. Habla de resultados fríos y no de procesos. Instala que lo único que importa es el resultado para que cuando alguien que no le conviene a alguien debe ser limpiado se lo pueda echar con consenso. Porque en este juego, como en todos, siempre se gana, se empata o se Pierde. Hasta el Barcelona pierde partidos. Sólo basta esperar que el echable pierda para decir que su continuidad es insostenible. Es decir: el periodismo deportivo opera.
- Y por último, y esta es su característica principal, parte de una realidad propia rígida, producto de un imaginario ideológico conservador, y juzga a la realidad con sus propios patrones. Ayer, Mariano Closs decía abiertamente "Brindisi se equivocó, en lugar del 4 debería haber entrado el 13", entre muchas afirmaciones similares. No interpreta o explica, juzga. Y lo hace desde una postura ideológica rotunda.

¿Es necesario que explique ahora por qué insisto en decir que el periodismo tomó el estilo del Periodismo Deportivo?
Por suerte además del periodismo, el vocero y el otro., está la gente, que ve la realidad en directo, sin que se la mastique nadie.
DON CHICHO

lunes, 3 de junio de 2013

La Argentina Nazi

Ya lo decía Lacan, la mentira es propia del lenguaje, es inherente a él. El que habla puede mentir. Es una apuesta ética no hacerlo. Y en el universo discursivo hay mentiras de todo tipo: Sutiles, piadosas, apoyadas en verdades, ridículas, groseras...y en relación a la credibilidad, las hay creíbles, dudosas e increíbles hasta la risa. Pero siempre tiene la mentira un anclaje en una verdad. Sólo así puede usar su velo. Si miento sobre un robo de bienes del estado de una persona, esa persona debe ser alguien no del todo limpio para que la mentira encuentre carnadura y comience a rodar. Acusar de corrupto al padre  Farinello no garpa. ¿Se entiende?
Estuve estos días tratando de entender por qué varios periodistas e intelectuales andan por ahí diciendo que el gobierno argentino es muy similar al gobierno nazi de Hitler. Me puse a pensar en qué verdad encuentra anclaje esta afirmación mentirosa. No cuaja lo del ataque a la libertad de prensa, nunca se respetó tanto y es este quizás el gobierno más atacado en y por los medios; tampoco lo de la persecución a opositores, salvo que se los persiga para que alguna vez den quórum; tampoco lo de las libertades civiles, basta recordar leyes pioneras en América en favor de las minorías postergadas; y desde ya, tampoco se persiguen grupos étnicos o religiosos para asesinarlos como sí se hizo durante la última dictadura, régimen apoyado por algunos de los que hoy denuncian al gobierno de ser nazi.
Luego de esto, resta decir que lo que lleva a homologar al gobierno argentino al gobierno nazi de Hitler son dos cuestiones: la intención de la defensa de la industria y el consumo nacional; y los cambios estructurales en los sectores de poder que determinan el rumbo de la política. Estas cuestiones, puntos en común forzados, que se llevan a cabo de forma TREMENDAMENTE distinta a como lo hacía el gobierno de Hitler, transforman al gobierno nacional en un ogro malo y autoritario que acota, pone límites, les achica el pito a los patrones de la vereda.
Instalan que el gobierno es Nazi, y el imaginario hollywoodense nos lleva al loco régimen que asesinaba personas por su étnia y arrasaba las calles de Europa sembrando terror, caos y muerte. Pero lo que les jode no es eso, como a EEUU no le jodió el exterminio a judíos, gitanos o comunistas; les jode que los limiten, que le intervengan el mercado, que impongan condiciones más justas. P
orque asesinar personas en pos de imponer su ideología es común tanto en EEUU como en muchos de los que apoyaron a Videla y hoy tienen acciones en TN.
DON CHICHO

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