El sábado a la noche Aerolíneas Argentinas decidió cancelar todos sus vuelos internacionales a causa del conflicto con los trabajadores afiliados a la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA), que conduce Ricardo Cirielli. La crisis había estallado el viernes cuando los controladores del espacio aéreo se demoraron durante todo el día en darles pista a los aviones, retrasando los vuelos. Esto produjo que el control aéreo pasara al ámbito militar nuevamente.
La jefa de Estado señaló que “no hay mejor manera de defender a los trabajadores que cuidar las fuentes de trabajo”. En medio del conflicto aeronáutico y la presentación del ministerio de Trabajo para la quita de la personería al gremio APTA, aseveró que "no vamos a permitir que nada ni nadie nos desvíe" del modelo económico.
Decisión de carácter socialista si las hay.
Lo que mas me gusta de esta presidenta es que de alguna forma rompe con el tradicionalismo de construcción peronista, donde los sindicatos ostentaban el manejo de los trabajadores, siendo fuerza aliada directamente al poder ejecutivo pero a cambio de prebendas, que muchas veces sirve para que ellos mismos sean el poder o deseen fervientemente serlo (que mejor ejemplo que Moyano por ser el gremio de mayor incidencia social) y muchas veces en sus cúpulas levantan la bandera de la defensa de trabajo y terminan siendo funcionales a sectores que buscan la desestabilización del modelo inclusive beneficiando a los mismos empleadores. Paradojas de este país, que también tiene gente con la ambición desmedida de acumular poder sin compartir nada. (Ideología de la más pura señores, que no distingue estratos sociales). Y sobre empezar a poner dudas por que el control aéreo pasa a los militares pensando que va a hacer tan ineficiente como en otras épocas, me parece que no son para nada las mismas épocas y por ende no son comparables. He dicho.
Don Cosme.
Don Cosme.
Parece que no sólo hay que colocar a la POLITICA delante de la ECONOMIA, sino también de cualquier instancia corporativa, ya sea sindical, empresarial ó profesional.
ResponderEliminarEs decir, si decidimos QUIENES VAN A CONDUCIR LOS DESTINOS DEL PAIS POR UN LAPSO DETERMINADO, todos deberán sumar su opinión, su disenso, su aporte, su apoyo, pero EL TIMON DEBE ESTAR EN MANOS BIEN DEFINIDAS y no debe ser empuñado por cualquiera, según le convenga.
Saludos
Tilo, 70 años