“Le pegan por ser gordo, lo filman y lo suben a la Web”

Cuando vi. la filmación por cuanto canal pasase, vino a mi mente si no son los medios grandes repercutores de violencia en pos de mostrar una sociedad devastada y sin valores.

Es cierto que cualquier hecho de violencia es punible, pero este tipo de actos lo he leído en las crónicas de todas las épocas sencillamente por la razón que el vituperio hacia el otro por defectos físicos, la agresión hacia el mismo, el abuso de poder (el chico sabe artes marciales), y los cómplices que miran y se jactan de la situación son reacciones constituvas al ser humano, que necesita un chivo expiatorio para sentirse más importante, para realzar su propia pobreza de espíritu.

La tecnología en este caso aporta nuevas posibilidades de mostrar (como todo un show) estas miserias que en tiempos de mi abuela (por aquella frase que todo tiempo pasado es mejor)  no podían ser reproducidas tan fácilmente, y si lo hacían de diez casos a lo mejor se reflejaba uno, eso no da a pensar que por eso que ocurriera menos.

El poder mirar tan logaritmicamente produce dos lecturas bien diferenciadas: repudio ante la situación, y brindar un nuevo campo que antes no existía que es la posibilidad de que muchos vean nuestras hazañas y así también el mismo acto logre reproducirse para lograr tal cometido. Esa puta necesidad de ser reconocido como fuere. Esto sí es nuevo con respecto a otros tiempos y eso resulta más peligroso. Pero señores, el show parece continuar. He dicho.
Don Cosme.