Por esa loca manía que tiene mi insomnio de cortar mi sueño en horarios impúdicos me veo haciendo zapping radial en lo profundo de la noche en busca de algún locutor tedioso que logre tumbarme. La otra noche, mañana temprano para ser sincero, caí en Cadena 3, la radio cordobesa, y me encontré con el señor Rolando Vera. ¡Todo un descubrimiento! Más allá de que labura en un medio identificado claramente con un sector ideológico de derecha, neoliberal, que actualmente apoya militantemente a De la Sota por ejemplo él es un cuadro puro de ese pensamiento, y lo vomita cada madrugada en su programa. Profundamente católico practicante y profundamente neoliberal. Dueño de la idea que reza que el país está tan mal (al borde del abismo, como nunca antes) porque nos alejamos de cristo y su moral. No utiliza eufemismos para hablar de la presidenta de la Nación, ministros o funcionarios menores: los llama corruptos, ladrones, farsantes, mediocres, cretinos y demás. Todo esto con un tono extraño, quiere imitar a Gonzalez Oro pero no le sale. Un asmático en recuperación parece más bien, o un tipo que no sabe leer y lo hace a los pochazos. Mejor es que lo escuchen, les juro que no tiene desperdicio. Es ideología pura en un cuerpo, sin distorsiones ni disimulos. Si fuera yo profesor de comunicación lo utilizaría para demostrar cómo la realidad siempre toma la forma de la mirada ideológica que se le da.
Esta mañana, el simpaticón de Rolando, criticaba fuertemente a Moreno. En un momento habló de lo difícil que es mantener una pyme abierta y de todos los negocios que cerraban en Buenos Aires. Dijo textualmente lo siguiente: "si tengo una empresa y pago 5 mil pesos de sueldo, debo pagar 5 mil màs al Estado, al gobierno, a estos ladrones...así no se puede...además de vacaciones y aguinaldo" En una oración se pasa por el forro un par de derechos laborales y civiles, y la base previsional del Estado. Evidentemente Rolando extraña un país en el que los derechos laborales eran solo de los empresarios, en el que los trabajadores debían besar los pies de sus patrones por darles míseros sueldos por 12 horas de laburo, en el que las cajas previsionales eran muy débiles o robadas por las AFJP. Extraña un país en el que la solidaridad era solo de Caritas, la limosnera institucional, en el que el Todos quedaba aplastado por el Uno. Porque con ese ejercicio aparentemente pueril de decir ¿para que pagar si se lo roban?, se busca cambiar un modelo estructural de Nación. Buscan dinamitar el orden legal porque en el sálvese quién pueda, siempre ganan los más poderosos.