“Pintadas matanceras en una mañana soleada”.

Caminando por la localidad de San Justo (para quienes no conozcan, el corazón del partido de la Matanza, zona oeste del Gran Buenos Aires, a unos 10 Km. del limite con Capital) me encontré con dos pintadas bien interesantes y diversas en sus expresiones pero atractivas las dos para su mención.

La primera de tinte mas doméstico si se quiere decía lo siguiente:”Pao te amo: Eugenia” y en la extensión de la letra, al final de su nombre, aparecía una florcita. Vaya declaración holgada. El cambio de eje es tan fuerte que se permite semejante exteriorización impensada si se quiere hace 10 años nomás.
La otra, tocando un tema tan sensible como el genocidio de estado institucionalizado el año 1976. Su pintada decía: Volveremos por los 30.000 desaparecidos ,firmado por la agrupación montoneros.

Ahora digo, ¿hace falta arrogarse para si la totalidad de las muertes por el genocidio de estado? De esa forma se deduce que toda la revolución producida en aquellos años pasaba exclusivamente por esta agrupación y había muchos docentes científicos artistas, escritores y personas de bien que defendían los ideales de la libertad y que no necesariamente tenían que colocar una bomba en alguna comisaría. Sólo a través de la palabra se debía posibilitar el cambio, la muerte traería más muertes y serviría aun mas como justificación para el genocidio. He dicho.
Don Cosme.