lunes, 25 de febrero de 2013

Hoy amanecí opositor

Hoy amanecí opositor. Me alejé de la corriente central del modelo que lleva adelante el gobierno nacional, y miré la cosa desde lejos, sin implicación. Vi muy claramente las cosas por las que huele mal  Dinamarca: La inacción en el sector de transporte con la inherente falta de respeto a todos los argentinos; los límites del impuesto a las ganancias; el silencio que rodea en relación a la megaminería y ley de bosques; la sacada del cuerpo ante los cada vez más frecuentes asesinatos de los Quom; el amiguismo con los impresentables burócratas de la CGT; y algunas otras cosas que ya retomaremos.
Hoy amanecí opositor; y me fue muy fácil serlo.Pensé cómo no me había dado cuenta antes...y para eso me acerqué a los opositores visibles al gobierno nacional, pensando en unirme a sus filas. Y ahí la cosa empeoró. La gran mayoría se opone al gobierno por las mismas cosas que yo lo apoyo; las cosas malas que antes mencioné, para ellos son detalles o están bien hechas. Los sectores que más o menos apoyan lo que yo apoyo del gobierno y critican más o menos lo que yo critico, son extremadamente tibios y se presentan junto a sectores cómplices de los momentos más oscuros de la patria. Está jodida la cosa. Se me complica mantenerme en pie sobre la tabla en el oleaje ideológico. Supongo que la cosa pasará por pelar la cebolla y ver las bases, las estructuras, la realidad verdadera; y elegir según la dirección del modelo político. Una vez ahí, es nuestro deber que en Dinamarca lo podrido sea expulsado. Debemos exigir ir más a fondo y que Argentina sea más digna con nosotros, y nosotros con ella.
DON CHICHO

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