ODIO POLÍTICO (Ley antiterrorista)

El artículo 213 de la tan citada Ley Antiterrorista dice lo siguiente:

El Código Penal Argentino establece en su artículo 213 ter. sancionado en 2007 que solo podrá considerarse autor del delito de terrorismo al que:

«...tomare parte de una asociación ilícita cuyo propósito sea, mediante la comisión de delitos, aterrorizar a la población u obligar a un gobierno o una organización internacional, a realizar un acto o abstenerse de hacerlo, siempre que ella reúne las siguientes características:
a) Tener un plan de acción destinado a la propagación del odio étnico, religioso o político;
b) Estar organizado en redes operativas internacionales;
c) Disponer de armas de guerra, explosivos, agentes químicos o bacteriológicos, o cualquier otro medio idóneo para poner en peligro la vida o la integridad de un número indeterminado de personas.»

Nos quedamos con el punto a), con lo que se quedó parte de la oposición y la prensa, para gritar a los 4 vientos que el gobierno es una dictadura que quiere tratar de terroristas a todos aquellos que opinen diferente. Y se toman precisamente de la frase "odio político". A partir de esta ley, terrorismo no es sólo lavado de dinero, narcotráfico armas, toque de queda... ahora el discurso cobra valor de instrumento desestabilizador.

Ante esto tiramos opiniones cruzadas, como lluvia de ideas que se caen de nuestros viejos y gastados cerebros:

1- El discurso puede ser un arma en sí misma. Grupos de poder económico pueden desestabilizar políticas públicas con mensajes apolcalípticos viciados de falsedad. Como ejemplo tenemos a Redrado y sus dichos que aseguraban una gran inflación, saqueos y la mar en coche, si se tocaban las reservas. Caos económico que le dicen.

2- Es un tanto polémica esa frase. ¿Quién va a determinar qué es odio político y qué es opinión política opositora? una vez más el problema no es el qué sino el cómo. Imagínense esta ley en un gobierno macrista...

3- Las críticas a esta ley se engloban en la lista de cuestiones que se usan para hacer ver como autoritario y casi-fascista al gobierno argentino. Ley antiterrorista, amistad con el gobierno chavista, supuesta ausencia de diálogo con la oposición, odio al pueblo trabajador por hacerlos hacer colas por la SUBE, los malos malos de la Cámpora que son como mini-montoneros.... Sólo un uso marketinero, para intentar desprestigiar, nada más.

DON COSME y DON CHICHO